Son
las hojas de la historia
que
dan su vuelta,
el
ciclo se va a repetir,
en
ella la premonición habita sus labios,
su
voz entrelíneas lo musita.
De
su ocaso nunca se desborda el sol,
y
cada mañana transcurre el mismo riel.
Ya
el episodio estaba vaticinado,
nada
vuelve atrás pero todo retorna,
y
la herida que propicié en el pasado
se
anclará en mi pie.
Por
ello pido perdón,
perdón
mil veces.
Ahora
de nuevo resucitarán las sombras,
no
nos bastará el silencio.
Ella
volverá como lo ha anunciado el cantante,
pero
esta será su última función.
Tal
vez regresará a su antigua bruma,
pero
pasará,
amor
pasarás.
Hugo Oquendo-Torres
La soledad de
mis miedos
12 de Febrero, 2014